
Ya quedaron atrás,
Las lagrimas de sal
La melancolía lejana
Aquellas hojas secas.
Se extinguió en el tiempo
La tristeza,
Y se me quebró la voz
De tanto gritarle a la luna.
Porque todo pasa,
Y con las horas,
Se van marchitando
Las viejas promesas
Que una vez colgaron
De tus labios.