Hoy quiero darte gracias una vez más, por permanecer a mi lado, silente, escucha, amigo que aunque lejos esta tan cerca, muchas veces al leerte te siento conmigo, tus palabras son de gran inspiración para mi, resurges la poetisa que a veces se pierde en un océano oscuro, sin brillo y sin luz, me devuelves la sonrisa y calmas mis heridas, tu, que en tu soledad a veces piensas y algunas lagrimas te hacen compañía, no son las únicas ni están solas, pues todos lloran la melancolía. Algún día todo cambiara. Tal vez veamos el mismo mar, con el reflejo de la luna llena, traviesa por demás, reírse de nuestras penas.
Me envuelve esta brisa fresca de primavera, trayendo consigo recuerdos lejanos, arrancados sin querer del aquel olvido forzado, me retumba tu nombre y sin querer imaginarte, vuelven como lluvia feroz, esos momentos tan gratos. Mas hoy, no quisiera que mis manos jugaran con tu pelo, ni mi boca anhelara tus ardientes besos, hoy solo evitar el quemarme, en tu fuego de nuevo, es mejor este lugar, este cielo que no deja cicatrices, este mar que me hace promesas futuras, y este viento con olor dulce.
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